Del 12 al 17 de agosto, se disputarán en el Letzigrund Stadium de Zúrich los Campeonatos de Europa de Atletismo. Los días 16 y 17, en ambos casos a las 9 de la mañana, hora local, se disputará la prueba de maratón. El sábado 16 la carrera femenina, y el domingo 17 la masculina.
A la espera de que el 30 de julio se dé a conocer la selección íntegra que representará a España en los Campeonatos, ayer miércoles se anticipaba la lista de integrantes que iban a componer el equipo maratoniano. La RFEA, en su circular 162/2013 de 25 de julio, ya había especificado los criterios a seguir para conformar el equipo.
Al margen de los criterios generales, en los que se detalla que podrán acudir a Zurich hasta tres atletas por prueba, los criterios específicos para la prueba de maratón aludían a una serie de consideraciones a tener en cuenta, desiguales, dada la idiosincrasia particular de los 42.195 metros.
En primer lugar, se necesitaba acreditar la marca mínima impuesta por la RFEA durante el periodo comprendido entre el 1 de enero de 2013 y el 28 de abril de 2014 en cualquier maratón incluido en el calendario RFEA que cumpliese con el Reglamento de las competiciones en ruta, o en cualquier maratón en el extranjero que estuviera incluido en el calendario oficial de la AIMS (Association of International Marathons and Distance Races). Dichas marcas fueron fijadas en 2h13:00 para la competición masculina, y 2h33:00 para la femenina.
La segunda premisa, demostrar un buen estado de forma. El Comité Técnico, según detallaba la circular, se reservaba además la decisión de no completar equipos en función del nivel atlético demostrado por los posibles componentes del equipo en las pruebas de selección previas.
Se establecía también que tendrían prioridad las marcas realizadas a lo largo de la temporada 2013-2014, y que en la prueba de maratón podrían ser seleccionados hasta seis atletas por prueba. Plaza segura para los dos primeros clasificados en el Campeonato de España celebrado en San Sebastián, siempre que consiguiesen la marca mínima, así como los atletas que se clasificaran entre los 15 primeros en el Maratón del Campeonato del Mundo de Moscú ’13.
Hay que tener en cuenta, además, y aprovechando la competición, que la disputa del Europeo coincide con la celebración de la Copa de Europa de Maratón, siendo el equipo masculino el vigente campeón continental (Barcelona ’10).
Vamos con la lista que salió ayer.
Ayad Lamdassem
Consiguiendo la mínima de manera soberbia en el Maratón de Londres el 29 de abril de 2013, el fondista nacido en Marruecos hace 32 años ha cosechado magníficos resultados durante este invierno. En la capital británica conseguía la que es la mejor marca de su vida en maratón (2h09:28), convirtiéndose además en el primer español que conseguía bajar de 2h10 desde que el actual responsable de cross, montaña y ruta de la RFEA, el barcelonés José Ríos, acreditara 2h09:38 el 2 de marzo de 2008 en Otsu.
Clasificado en 17ª posición en el Campeonato Mundial de Media Maratón en Copenhage (2º europeo) tras vencer en el Campeonato de España de la especialidad, conseguía el oro en el Campeonato de España de Cross, tanto en la competición por clubes (Marina D’Or) como en la individual (Mérida). Su segundo maratón de 2013 deparaba un interesante 2h12:31 en Fukuoka en diciembre. Posiblemente, el fondista español más en forma del momento.
Javier Guerra
Tras proclaramente brillantemente campeón de España en A Coruña el 2 de febrero de 2013, consiguiendo automáticamente la mínima para Zurich (2h12:21) en su debut en la distancia, un invierno de menos a más le valía al segoviano para representar a España en el Europeo de Cross, consiguiendo un discreto 42º puesto. Subcampeón de España de Media Maratón, también en A Coruña, tras su compañero de equipo Lamdassem, y un 38º lugar en el Mundial de Media Maratón (con marca personal, 1h02:27), es seleccionado además a tenor de su extraordinario 15º puesto en el Mundial de Moscú en agosto del pasado año (primer europeo, 2h14:33).
Carles Castillejo
Temporada complicada para el barcelonés que, tras delicados problemas físicos, se alzaba con el Campeonato de España en el Maratón de San Sebastián el 24 de noviembre, consiguiendo la mínima (2h12:43), después de la afrenta de Valencia, y asegurando con ello su presencia en Zúrich. Tras someterse a una operación quirúrgica en diciembre para intentar acabar con sus problemas en el tendón de Aquiles, el doble campeón de España de Maratón buscará recuperar su aguerrida calidad en la prueba europea.
Competidor sobresaliente, su mejor marca queda lejos (2h10:09 en Castellón ’11), pero su experiencia y saber estar serán básicos para lograr un buen resultado. En pleno proceso de recuperación, tres Juegos Olímpicos contemplan a un fondista histórico en nuestro atletismo.
Alessandra Aguilar
Campeona de España de Media Maratón en A Coruña (1h11:16), 21ª en el Mundial de Media Maratón, con marca personal (1h10:56), magníficos resultados en cross durante el invierno, y sensacional 5º puesto en el Maratón del Mundial de Moscú (2h32:38), con el que automatizaba su selección para Zúrich. Veterana lucense que contará con 36 años, está cosechando, a las órdenes de Antonio Serrano, los mejores resultados de su vida atlética. 2h27:00 como mejor marca personal (Rotterdam ’10). Una de las referencias españolas de la actualidad.
Estela Navascués
Su brillante e incontestable triunfo en el nacional de San Sebastián, consiguiendo la mínima (2h32:38), le reporta la satisfacción de la clasificación directa para el Europeo a esta tudelana de 33 años, que entrena a las órdenes de Abel Antón. Tras un debut maratoniano discreto en 2008, pero con marcas a tener en cuenta en media maratón, esta pasada temporada dio el salto definitivo a una especialidad que ha destapado el tarro de las esencias.
Azucena Díaz
Debut maratoniano ilusionante el pasado 13 de abril para esta madrileña de 31 años. Rotterdam era testigo de su quinto puesto, con un registro de 2h32:22, consiguiendo la mínima para el Campeonato de Europa. Tres veces campeona nacional de media maratón (2009, 2010 y 2012), ha dado el paso hacia el maratón, y la jugada no le ha podido salir más redonda.
Examinando con detalle la situación, nos vienen a la cabeza varias cuestiones. En primer lugar, y de forma decididamente ilógica, la Real Federación Española de Atletismo establece una marca mínima para una prueba en la que la EAA (European Athletics Association), ente regidor de las suertes de este deporte a nivel continental, no asigna ningún criterio mínimo. Asimismo, se establece la posibilidad de que hasta seis atletas representen a cada país en la prueba reina del fondo mundial en la competición europea. Como decimos, no se exige un registro mínimo ante la EAA, por lo que resulta poco menos que incoherente y ciertamente contradictorio que una entidad nacional limite lo que un organismo superior decide no acotar.
Defendiendo la circunstancia de que, una vez la RFEA apuesta por imponer una marca mínima, ésta debe ser asumida y tenida en cuenta como baremo decisorio, y conocida y respetada por el atleta participante, da la sensación de que es discordante tomar como referencia absoluta una marca concreta e inflexible, sobre la que existen atletas que siempre van a poder quedar descartados por apenas segundos. En el ránking masculino 2013/14, los tres siguientes a los seleccionados, José Carlos Hernández, Pablo Villalobos y Eliseo Martín, han acreditado, respectivamente, 2h13:26, 2h13:39 y 2h14:05. Y en categoría femenina, de igual manera, encontramos resultados muy respetables en las marcas de Elena Espeso (2h35:48), Vanessa Veiga (2h35:57) y Yolanda Gutiérrez (2h38:18).
Teniendo en cuenta, además, que se disputa la Copa de Europa de Maratón, en la que cada delegación debe presentar al menos tres atletas para tener acceso a puntuar, la situación se presenta aún más rocambolesca. La escuadra masculina se ha proclamado vencedora de tres de las últimas cinco ediciones de esta competición (Helsinki ’94, Munich ’02 y Barcelona ’10), consiguiendo también la plata en Budapest ’98. Mientras que el equipo femenino ha conseguido solamente un 5º y un 7º puesto a lo largo de la historia (Roma ’85 y Huy ’88), y al resto de competiciones no presentó equipo completo, por lo que no puntuó.
La RFEA se arriesga a malograr una excelente ocasión para cosechar lo que supondría un esperanzador resultado para nuestro atletismo, en pos de seleccionar un doble equipo de tres participantes que, si bien presenta empaque, calidad y solidez en ambos géneros, resulta obviamente insuficiente a nivel de efectivos. Cualquier problema físico u obstáculo imprevisto, demasiado habitual e incontrolable durante una prueba tan singular como el maratón, causará la baja automática del equipo nacional en la clasificación por países para la Copa de Europa, ya que deben concluir la prueba tres representantes, sumándose sus tiempos. Sólo esta premisa debió ser clave a la hora de flexibilizar un criterio que, lejos de sentar cátedra como acierto, ha sembrado la duda y la controversia por la manera de actuar de una Federación que, por momentos, parece perder el control del barco que capitanea.
Ignorando si la delegación técnica confía plenamente en un soberbio resultado individual, o si ha imperado la desquiciante mesura predicada en los últimos tiempos por un organismo dominado por cargos perpetuos y tristemente acorazados, en lo que a tiempo y economía se refiere, la escasez de efectivos se presenta tan ilógica como insuficiente. Si por cualquier razón se perdiese la posibilidad de puntuación para la competición colectiva, la Federación debiera plantearse sus criterios de actuación de manera inmediata. Porque el principal perjudicado, como siempre, es el atleta. Paradójicamente, también es el máximo protagonista de esto.
Viendo el mal momento del atletismo en general es increíble que se desaprovecha la ocasión de conseguir una medalla por equipos en la ahora más fuerte especialidad que tenemos. Es mucho el riesgo que corren al no llevar un par de atletas más tanto en hombres como en mujeres ya que al celebrarse en verano el europeo las condiciones son más duras y por tanto más frecuentes los abandonos.
Kiko66, ese es el tema básico. No es un ataque frontal a la RFEA, como muchos han querido ver, ni una crítica a la selección de 3+3 que acudirá a Zurich, que es magnífica en talento y competitividad.
Es un problema de efectivos, porque como bien dices, abandonando uno/a, se pierde la oportunidad de puntuar para la Copa de Europa. Y no creo que el atletismo español, pese a que muchos parezca que quieran hacer ver lo contrario, esté para florituras.
En estos casos, no puede imperar la rigidez de criterios, manteniendo siempre el respeto y la comprensión hacia el resto de disciplinas atléticas. Tiene que haber flexibilidad, porque posibles buenos resultados dependen de ello.
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Yo no soy tan experto, pero enserio con esas marcas ¿creéis que España se puede acercar a las medallas?
Se que no es el debate, pero quería puntualizar.
En hombres, Lamdassem ostenta la 2ª mejor marca de 2013, Guerra la 17ª y Castillejo la 19ª. No cuento la de Abraham Kiprotich, 1º (sancionado por consumo de EPO).
Y en mujeres, Aguilar tiene la 12ª mejor marca de 2013.
No son marcas para tirar cohetes, pero en un Campeonato de Europa no hay que fijarse esclusivamente en los tiempos. En el último Europeo, sin ir más lejos, Rothlin fue campeón corriendo en 2h15:31, Chema fue plata con 2h17:50 y Safronov bronce con 2h18:16, registros todos ellos muy superiores a sus plusmarcas personales (todos ellos por debajo de 2h10). De ahí a no tener tan en cuenta las marcas, porque en un Campeonato de este tipo, a priori (lo recalco), no se corre tanto como en los maratones comerciales.
Sin embargo, todo lo que hablemos ahora serán meras suposiciones.
Un saludo!!
Esta claro que las marcas nunca va a ser iguales en competiciones de este tipo, pero las marcas personales deberían ser una guía para lo que debería ocurrir, y las de España me parecen un poco pobres, pero repito que hablo sin saber.
Pero claro si hablamos de diferencias de 3 minutos, luego en la carrera todo puede pasar…