Los últimos meses para Vanessa Veiga han sido un sueño. La atleta gallega, afincada en Toledo, se proclamó Campeona de España de maratón el diciembre pasado en Castellón y desde entonces ha disfrutado mucho de su clasificación para los Juegos Olímpicos de Londres.
Vannessa, entrenada por su suegro, Julio Vicente Rey, ha estado entrenando específicamente para la cita olímpica desde el día después del maratón de Castellón, «y con esa tranquilidad de saber que ya iba a ser seleccionada». Los tests de lactato que hicieron hace unas semanas todos los maratonianos los pasó sin problemas: «Fueron muy bien, hacía muchísimo claro, pero respondimos bien las tres».
En Londres quiere mejorar marca y «llegar a meta con la sensación de haber dado todo lo que tengo dentro». Ambiciosa, se ve capaz de bajar de 2h30 después de su primera incursión en la distancia (marca: 2h32:57), «pero claro, hay que hacerlo». Y entrena a conciencia para ello. «Las dos últimas semanas han sido muy duras, de muchos kilómetros: Se me hacía muy duro salir a correr, pero hora me encuentro genial y, sobre todo, muy motivada». Destaca como entrenamientos duros «un par de rodajes que hice de 2h20 bajo un sol de justicia y uno de 12 series de 1000 entre 3:10 y 3:12».
Después de los Juegos Olímpicos no volverá a competir en los 42.195m este año y deja en manos de su marido y su representante lo que hará el año que viene. En Julio ve a su maestro, su referente en el atletismo y al motor de su vida. Sueña algún día con batir el récord de España de Ana Isabel Alonso (2h26:51 en 1995): «Voy a pelear con uñas y dientes por mejorar esa marca. Sería un bonito tener el mismo récord que mi marido».
Lamenta que no pueda compartir la experiencia olímpica con su amiga Gema Barrachina: «Le deseo una pronta recuperación, me ha ayudado mucho a hacer realidad este sueño». Siendo mamá de 3 niños, le preguntamos cómo ven que su madre sea una super-atleta: «Lo entienden a su manera… pero están encantados y muy felices. Están muy orgullosos de su madre, y eso es lo más importante para mí». Del día de su retirada no quiere ni oir hablar e incluso se anima a decir que que luchará por un puesto en Río de Janeiro 2016: «Después de lo que estoy viviendo, quiero repetir. ¡Me voy a apuntar ya a clases de samba!«
Pagaria por ver unas clases de samba de Vanesa Veiga jaja. Ya en serio, yo sí que la veo bajando de 2h30, quiza no en Londres, pero si el año que viene.