Las victorias son épicas, como también lo son las derrotas. En una carrera inteligente, de menos a más, Javi Guerra ha sido cuarto en una remontada épica y en una carrera en la que ha sido bronce hasta los dos últimos kilómetros, cuando ha sido adelantado por el atleta ruso Aleksey Reunkov. Un tiempo de 2:12.32 horas que le deja a apenas diez segundos de su marca personal en un recorrido tan duro como el de Zurich, lo que habla muy a las claras del carrerón del discípulo de Antonio Serrano. Una carrera lanzada desde el principio por el polaco Chabowski, que ha pegado un pinchazo espectacular en los últimos diez kilómetros dando paso al nuevo campeón Daniele Meucci.
Una carrera marcada desde el primer metro por el ataque temprano, y el descalabro tardío, del polaco Marin Chabowski que desde el principio ha abierto un hueco enorme entre él y el grupo perseguidor, y no hacía sino aumentar el ritmo. Una escapada frenética que ha frenado abruptamente a falta de diez kilómetros: gesto de sufrimiento, una mano al costado, y ver cómo Daniele Meucci (1º) y su compatriota Shegumo (2º) le adelantaban sin compasión. Por detrás, el drama: Javi Guerra escalaba al bronce, y amagaba incluso con conseguir la plata, pero las fuerzas y el estómago le fallaban en los últimos metros y sucumbía al ataque del ruso Reunkov.
En zona mixta, emotivo abrazo con su entrenador Antonio Serrano, que en dos días ha visto cómo las cuestas de Zurich se llevaban las ilusiones de sus dos mejores atletas, Guerra y Aguilar. «El circuito es durísimo», ha acertado a decir Guerra en zona mixta a preguntas de los medios, añadiendo que ahora el objetivo es el mundial de 2015 en Pekín.
Un nuevo capítulo en la aventura maratoniana de Javi Guerra, que certifica así lo positivo, aunque amargo en este momento, del salto que dio en 2013 cuando abandonó años de desencuentros con la pista para enamorarse del asfalto. Debutó en 2013 con una marca de 2:12 horas y ese mismo año fue 15º en el mundial de Moscú. Hasta nuevo aviso, la mejor actuación española en un campeonato de Europa al aire libre en la distancia de Filípides es la medalla de oro del mítico Martín Fiz en Helsinki 1994, así como los 2:10.31 que le dieron la victoria en ese campeonato.
Fenomenal como ha dado la cara Guerra.
Patetico como ha manejado la Federación el tema de la prueba de maratón, tanto en masculino como en femenino.
Habiendo gente con buen estado de forma y tiempos muy cercanos a la mínima se emperraron y encerraron en los números y ni siquiera pensaron en la posibilidad de reservas. Así pasó lo que pasó: lesiones y de 3 chicos y 2 chicas previstos acabamos presentando SOLO a 1 chico y 1 chica. Y a todo esto «defendiamos titulo» de la Copa de Europa…
Madre mía que organización…