El pasado domingo 24 de noviembre Skechers volvió a dar su apoyo al veterano 10K de Canillejas en el que finalmente se impuso el atleta español Alejandro Fernández, poniendo la guinda a una jornada que rozó la perfección, con un clima y un ambiente ideales para la práctica del atletismo.
Hacía 16 años que un español no se imponía en el Trofeo José Cano. Sin embargo, el pasado domingo, el atleta Alejandro Fernández logró registrar su nombre como ganador en la ya histórica XL edición de la carrera de Canillejas.
Fernández, que atacó a tiempo ante la marea africana y que logró la que hasta ahora ha sido la victoria más importante de su vida, bajó de 29 minutos (28:54), con una media de 2:56/km en un trazado que el propio Alejandro calificó como «muy rápido».
Una vez en meta, absolutamente emocionado, el vencedor dedicó un recuerdo al barrio de Canillejas, verdadero protagonista de esta carrera, a la que Skechers viene prestando todo su apoyo en los últimos años: «Tengo que dar las gracias a la gente por todo lo que anima».
Y es que las calles son parte de la genética de este 10K que lleva siendo parte de la identidad de Canillejas desde la primera edición de aquel 23 de noviembre de 1980 que hoy queda tan cerca y tan lejos.
Esta XL edición del Trofeo José Cano también hizo historia al poner el listón muy alto, no sólo en las emociones, sino también en las estadísticas: 288 atletas bajaron de los 40 minutos y 2078 terminaron la carrera en un día que resultó perfecto para correr.
Un año más, el 10K de Canillejas demostró que no se entendería sin las carreras infantiles. El pasado domingo, cerca de un millar de chavales se lanzaron a las calles de San Blas para disputar el trofeo en cada una de sus categorías infantiles y juveniles, tal y como lo hicieron, a lo largo de las cuatro décadas de historia de la carrera, otros grandes atletas que hoy están en la élite.
Por todo ello, tanto Skechers como la organización de la carrera agradecen el esfuerzo a todos los que corrieron, a todos los que colaboraron y a todos esos espectadores que dedicaron la mañana del domingo 24 de noviembre a animar a los atletas, haciendo que, entre todos, volviese a ser un día inolvidable.