Los Feetures Elite Light Cushion son unos calcetines muy equilibrados que nos van a servir para mostraros lo que saben hacer en esta empresa americana que, aunque en este 2017 cumple quince años de vida, la gente que forma parte de ella atesora muchos años de experiencia en el mundillo del textil, principalmente, en la parte de los calcetines deportivos.
Estructuran su catálogo en cinco gamas: High Performance, Elite, Elite Merino+, Graduated Compression y Therapeutic aunque en España van a trabajar sólo las tres primeras (High Performance, Elite, Elite Merino+).
Dentro de cada una de estas gamas, ofrecen los calcetines en tres niveles de acolchado que, de más finos a más gruesos serían: Ultra Light, Cushion / Light Cushion, Max Cushion.
Y, por si fueran pocas las combinaciones que se pueden hacer ya con las gamas y los grosores, también podéis elegir la altura que más os guste de las cuatro que tienen disponibles: No Show Tab, Quarter, Mini Crew, Knee High.
Como veis, Feetures ofrece opciones para todos los gustos y colores porque también disponen de un amplísimo catálogo cromático, desde los discretos blancos y negros u oscuros hasta colores que son bastante llamativos.
No se prodigan mucho en diseños estrambóticos sino que tienden a las combinaciones más o menos lisas, pero reconozco que los colores tienen su punto y que quedan muy chulos.
Hemos estado dándoles candela a los Elite Light Cushion durante unas cuantas semanas y, como hemos tenido la suerte de que haya coincidido con el tiempo de cambio del frío al calor, hemos podido probarlos en una gran variedad de situaciones así que creemos que la información que os vamos a proporcionar es muy rica en contenidos.
Los Feetures Elite Light Cushion al Detalle
La composición de los Feetures Elite Light Cushion es de un 96% nylon y el 4% restante elastano con lo que, como os podéis imaginar, son unos calcetines que os van a durar mucho tiempo.
O eso, o yo he tenido mucha suerte con los dos que he podido probar porque los tengo en muy buen estado, sobre todo, a nivel de elasticidad, que mantienen el tipo como el primer día.
Quizá han perdido un poco de brillito en algunas zonas (sobre todo en las de mayor roce) pero nada que le afecte al funcionamiento así que no os asustéis tras los primeros 5-6 usos porque se estabiliza ese aparente desgaste.
La primera impresión que transmiten es de firmeza y, de hecho, quizá os parecerán en la mano más gruesos de lo que os esperáis porque al ver Light Cushion, seguro que os esperáis unos calcetines tipo papel de fumar y no son así.
Cuando os los calcéis por primera vez o metáis la mano dentro, seguiréis pensando lo mismo, «pues no son tan finos”, pero no os detengáis ahí, seguid teniendo fe y calzaos unas zapatillas porque ahí cambia totalmente la cosa y es cuando descubrís lo bueno que os aportan los Elite Light Cushion, un equilibrio muy bueno entre todos los factores que debemos pedirle a unos calcetines deportivos: transpirabilidad, suavidad, frescura, acolchado y protección.
En ese momento es cuando te acuerdas de que te dijimos aquí que hay una gama Ultra Light y ya cuadra la cosa de los grosores.
Personalmente, me parece que, para unos calcetines de entrenamiento, grosores de este estilo son los más polivalentes porque, si son más gruesos, a veces no consigues meterlos bien en las zapatillas, que te aprietan algo más de la cuenta o empapan mucha agua si te mojas y, si son más finos, a veces echas en falta un poco más de protección contra los roces, sobre todo si son zapatillas un poco contundentes.
Además, si son unos calcetines con una construcción tan trabajada como la de los Elite Light Cushion, ese grosor le permite que aguanten muchos usos y lavados en muy buen estado.
Llama la atención la contundencia que se nota en estos calcetines, sobre todo, con esta altura de caña, que casi te hace pensar la primera vez que puedan ser unos de esos calcetines de compresión que suben sólo hasta mitad de la pantorrilla, hasta donde se empieza a acentuar la separación de los gemelos (justo el punto ése donde notamos la típica molestia en el sóleo).
Pero no, no son de compresión, simplemente es que la caña es como si fuera toda una prolongación de la sujeción del tobillo de un calcetín bajo y mantienen toda esa sujeción.
Hay quien a quien no le gusta nada estas alturas pero, por alguna razón, se están poniendo un poco de moda y, de hecho, algunas marcas utilizan esa altura para lucir diseños muy llamativos.
No entro en los temas de modas y simplemente remarcaré que a mí es una altura que me parece muy útil porque ofrece protección cuando corres por zonas con matorral bajo, te evita roces en los maléolos, no deja que entre arenilla y, un detalle importante: reparte la presión del elástico por una zona muy grande con lo que no os va a presionar en exceso en el aquiles. Amén, por supuesto, de lo que comentaba de la durabilidad que, al tener tanto elástico, es más duradero ya que no se da de sí y siempre vais a tener el calcetín a punto.
Por cierto, he dejado para el final la medida de la altura, que es de 13-14 centímetros porque así no dejáis de leer si no os gustan los calcetines un poco altos. De todas formas, si no os gusta, ya habéis visto que tenéis otras alturas más bajitas así que no os marchéis aún, que tenéis mucho que descubrir aún de los Elite Light Cushion.
Aunque tengan sólo un 4% de elastano, estiran bastante y con más facilidad de la que parece así que, aunque los veáis más bien pequeñillos, estirad un poco y calzadlos en vuestra talla habitual.
Si os encontráis entre dos tallas, ya es cosa de que os gusten más o menos ajustados porque, si os gustan los calcetines sueltitos, mejor la talla superior aunque perderíais la comodidad de llevar los calcetines bien pegaditos al pie, como una segunda piel.
Antes dije que los Elite Light Cushion tenían una mezcla de 96% nylon y 4 elastano pero, si eso lo pasamos a tecnologías propietarias de Feetures, aparece el iWick que tantas veces mencionan en sus descripciones.
Son unas fibras que mezclan el poliéster y el nylon, muy suaves y que buscan una rápida expulsión del sudor hacia el exterior, para que el pie vaya seco en todo momento, algo básico en unos calcetines.
En estos, a pesar de ese grosor que se nota en algunas de sus partes, va mucho mejor de lo que uno se espera y no sólo funcionan muy bien a nivel de la gestión de la humedad sino que también se notan bastante más frescos de lo que parecen.
Cuando revisas sus zonas, no se ve ninguna especialmente fina (de las de tipo papel de fumar), notando una disminución significativa sólo en la parte del empeine y en la cara anterior del tobillo, donde dobla, pero ni siquiera los días calurosos los he notado agobiantes.
Cierto es que si hace mucho calor y vas con unas zapatillas de las recargadas con mucho acolchado quizá no son los más adecuados, pero creo que, para el grosor y acolchado que tienen, son relativamente frescos o, al menos, no son calurosos, no se te empapa el pie en tu sudor.
Hablando de los acolchados de los Elite Light Cushion, no os penséis que tienen esos típicos rizados interiores que no hacen sino empapar sudor y humedad, además de hacer que el pie deslice cuando se corre rápido porque es un rizado bastante tupidito que, ofreciendo esa misma protección y suavidad, evita los problemas que mencionaba antes.
Esto se aprecia muy bien en la puntera, talón y planta del pie y, a pesar de lo poco aficionado que soy a ese tipo de acolchados en la planta del pie, con estos he ido muy a gusto así que, chapeau por Feetures.
Merece la pena detenerse un poco en la puntera donde han sido capaces de eliminar por completo las costuras gracias a su tecnología Perfect Toe. Muchas veces leemos lo de que no tienen costuras pero de veras que los Elite Light Cushion no las tienen, ni siquiera una pequeñita o una de las que dejan el atadillo en uno de los laterales.
En la puntera son algo menos ceñidos, pero no dejan que bailen los dedos, sigue siendo un calcetín para quien gusta de ir ajustadete.
De hecho, en la zona media disponen del típico elástico que le da la vuelta al empeine para sujetar bien al pie. Varía su anchura, algo más amplio en la cara interna para dar un poquito de apoyo en el arco.
Como os podéis imaginar, esto hace que los calcetines sean específicos de cada pie, que haya que aprender que la «L» es de «Left» y va para el pie izquierdo y la «R» es de «Right» y va para la pezuña derecha. Sí, sí, ya sé que todos sois máster en English y sabéis eso, pero lo digo por si acaso, que no sería el primero que se da cuenta de que se los ha puesto al revés. Aunque, bueno, eso suele ser más bien por despiste que por no saber lo de izquierda y derecha.
A nivel de durabilidad, volvería destacar lo de antes de que no os dejéis llevar por la apariencia tras los primeros cinco o seis usos porque, aunque pierdan un poco de brillo, se estabilizan ahí y la merma no afecta nada más que a la parte exterior o, quizá, un pelín a la suavidad, pero muy poquito. El elástico sigue impertérrito lavado tras lavado, como si los acabarais de estrenar.
De hecho, tan seguros están de la calidad de sus calcetines que ofrecen garantía de por vida, algo que me llama la atención por haberlo visto destacado de esta forma tan clara en el mundillo de los calcetines en empresas americanas (no me suena haberlo visto en ninguna española o europea).
Como habéis podido ver, los Elite Light Cushion son unos calcetines que me han gustado mucho y que me parecen una buena opción para quien quiera unos calcetines fuertes, con equilibrio entre acolchado y transpirabilidad, duraderos y relativamente transpirables.
Quizá con lo que me quedaría es con la sensación de sujeción porque quedan muy ceñidos y sería la característica que pondría como determinante (el que quiera calcetines sueltitos, que mire otra cosa).
Ah, si lo que os echa para atrás es el tema de la caña de los Elite Light Cushion, dadle una oportunidad los No Show Tab (quedan al borde de la zapatilla) o los Quarter (tobilleros) porque los he podido utilizar en tiempos pasados (cuando entraron en España los de Feetures) y el rendimiento es como el de los que acabamos de ver, solo que más bajitos.
