Dejando la reunión de Kinston aparte, de la que ya informa Alberto Pozas en su artículo, ha sido un fin de semana de curiosidades y rarezas en el panorama atlético mundial.

La primera extrañeza aparece en los 25 kilómetros de Berlín, una distancia insólita de por sí. Denis Koech, aquel jovencito nacido en 1994 con 59:14 en media, y que ahora se hace llamar Denis Kimetto y ha rectificado su fecha nacimiento a 1984, ha logrado la plusmarca mundial de la distancia con 1:11.18. Sale a 2:51 el mil o, lo que es lo mismo, a 1.00:09 por los 21,097 kilómetros. El récord anterior era 1:11.50 y pertenecía a Sammy Kosgei desde 2009. Un desempeño excepcional para la nueva identidad de Kimetto.

La segunda rareza de la semana era el regreso del norteamericano Andrew Wheating a las pistas. Wheating, para quien no lo recuerde, es un mediofondista que lleva seis temporadas practicando atletismo y que posee 1:44.56 en 800 y 3:30.90 en 1.500 metros, aunque es más conocido por lesionarse dos o tres veces cada temporada, y por su rumbo errático. Wheating ganó con 3:44.97 sin liebres y en un día muy ventoso. Ojalá no siga los pasos de Alan Webb.

Hablando de Alan Webb, afrontaba su ¡undécima! competición de la temporada, esta vez un 800 frente a Robby Andrews (1:44.71PB) y el decatleta Curtis Beach (1:47.99PB). El resultado fue decepcionante, con triunfo para un enérgico Michael Rutt (1:46.86) tras un paso de 52 segundos por la campana. Andrews quedó segundo con 1:47.11, Webb sexto con 1:51.05 y Beach, que había corrido minutos antes los 110 metros vallas simultaneándolo con el concurso de altura, se limitó a terminar la carrera en 1:56.57.

Puede verse la prueba en este vídeo.

Y una curiosidad más: en otra carrera, el hijo de Steve Ovett, Freddy Ovett (nacido en 1994) rebajó su marca en 800 metros a 1:53.21. A esa edad, en 1973, su padre corría en 1:47.34. A Freddy le pasa un poco como al primogénito de Alberto Juantorena, que era un notable decatleta, sin más. Y es que de tal palo, no sale tal astilla (siempre).

Avatar
Licenciado en Periodismo y corredor practicante (cada vez más lento) a razón de 4/5 días por semana. Ha desempeñado diversas responsabilidades en instituciones públicas, siempre en el área de comunicación, y ha participado en los equipos de prensa de varias campañas electorales autonómicas, nacionales y europeas. Autor del libro "El Derecho a la Fatiga", un estudio sobre el dopaje en las carreras de fondo y mediofondo.

Escribir respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here

Notificarme los nuevos comentarios por Email. También puedes suscribirte sin comentar.

Te informamos de que los datos de carácter personal que nos proporciones rellenando estos campos serán tratados por Depormedia Network, S.L. como responsable de esta web. La finalidad de la recogida y tratamiento de los datos es para gestionar los comentarios.

Legitimación: consentimiento del interesado. Como usuario e interesado te informamos de que los datos que nos facilitas estarán ubicados en los servidores de OVH Hispano SLU (proveedor de hosting de Depormedia Network, S.L.), dentro de la UE.

Si marcas la casilla de "notificarme los nuevos comentarios por email", los datos se seguirán guardando en los servidores de OVH Hispano. En cada notificación habrá un enlace para darte de baja por si en cualquier momento quieres dejar de recibir estas notificaciones.

Si marcas la casilla de "suscribirme al newsletter semanal de foroatletismo.com", los datos se guardarán en la lista de MailChimp (proveedor de Depormedia Network, S.L.) fuera de la UE, en EEUU. Pero Mailchimp está acogido al acuerdo EU-US Privacy Shield, así que puedes estar tranquilo. También habrá en cada email que recibas un enlace para darte de baja.

Además, podrás ejercer tus derechos de acceso, rectificación, limitación y suprimir los datos en [email protected], así como el derecho a presentar una reclamación ante una autoridad de control. Puedes consultar la información adicional y detallada sobre Protección de Datos en la política de privacidad.

Y dicho esto, si te ha molestado, discúlpanos por el ladrillo que nos hacen poner.