Un buen chequeo deportivo es algo por lo que deberíamos pasar todos los corredores de forma periódica (anualmente, por ejemplo) ya que el desembolso que hagamos en estas pruebas es, en realidad, una inversión en salud: asegurar que nuestro cuerpo está preparado para la práctica deportiva sin ningún riesgo no tiene precio.
Por qué los corredores deberíamos hacernos un chequeo médico anualmente
Si alguna vez te has formulado una de las siguientes preguntas, sin duda un chequeo deportivo te las respondería:
- ¿Estoy sano?
- ¿Tengo algún riesgo relacionado con mi corazón como angina de pecho, muerte súbita, infarto agudo de miocardío…?
- ¿Dónde se sitúa mi umbral aeróbico? ¿Y mi umbral anaeróbico?
- ¿Cuál es mi VO2Máx?
- ¿Estoy preparado para correr un maratón?
- ¿Son realistas los objetivos que me he marcado? ¿Los puedo conseguir?
- ¿Estoy entrenando de forma correcta?
- ¿Cuál es condición física real? ¿Qué nivel tengo?
- ¿Cuál es mi potencial físico?
- ¿Hasta dónde puedo llegar en competición?
- ¿Tengo alguna limitación, por ejemplo, a nivel cardíaco, que pueda restringir mis sesiones de entrenamiento?
- ¿Hay alguna práctica deportiva que esté contraindicada para mi caso particular?
- ¿En qué tipo de entrenamiento debería profundizar más para mejorar mi rendimiento y mi estado físico general?
En qué consiste un chequeo médico deportivo: nuestra experiencia con Savia
Un chequeo médico deportivo se compone de varias partes. Antes de pasar a la prueba de esfuerzo, a lo que es el test aeróbico y ponernos a correr, nos haremos un electrocardiograma, y con los resultados del mismo pasaremos a consulta con el doctor.
En este punto el doctor nos preguntará por los antecedentes: si hemos tenido palpitaciones, algún problema relacionado con riñones, estómago, hígado, pérdidas de conciencia… Y también a nivel locomotor: lesiones musculares, articulares, tendinosas, operaciones realizadas, etc.
Tomará nota asimismo de nuestro historial deportivo: cuánto tiempo llevamos entrenando, cuáles son nuestras mejores marcas en las distancias en las que hemos competido, cómo es nuestro entrenamiento actualmente, por ejemplo: cuántos días entrenamos a la semana, qué tipo de sesiones hacemos, a qué ritmos corremos…
Y para acabar, nos preguntará cuál es nuestro objetivo. Así podrá valorar, tras el test aeróbico, si tenemos la capacidad de llevarlo a cabo, si podemos correr incluso a ritmos más exigentes o si, por el contrario, deberíamos ser más conservadores y delimitarnos un objetivo más comedido.
En el chequeo es, además, importante tomar todas las medidas posibles: altura, peso, porcentaje de grasa. El doctor también nos auscultará y nos hará un reconocimiento general: valoración postural, flexibilidad, cálculo del índice de masa corporal, etc.
Así pasaremos a la prueba de esfuerzo, calentando unos minutos antes de empezar a correr de forma progresiva en intensidad: empezaremos corriendo a 8 km/h y cada diez segundos se nos aumentará la velocidad, muy poco a poco.
Mientras corremos, se recogerán todos los datos necesarios para darnos información muy detallada y, sobre todo, muy últil para desarrollar nuestra práctica deportiva. Y, al finalizar, el doctor tomará también medidas muy importantes para hacer una foto completa de nuestro estado de forma: por ejemplo, nos tomará la presión arterial un par de veces, o el ácido láctico, que se recogerá el valor máximo haciendo la medida a los tres minutos de finalizar la prueba.
Vamos a ver, con la gran cantidad de datos arrojados después del test aeróbico y del reconocimiento con el doctor, por qué es tan útil pasar de forma periódica por un chequeo deportivo de esta magnitud.
Tras verificar que no hay ningún problema relacionado con nuestro corazón y que estamos sanos, el doctor nos hará un informe muy relevante para aprovechar nuestro máximo rendimiento.
Como primer dato más destacado del informe ergoespirométrico tenemos el consumo máximo de oxígeno, la capacidad que tenemos de aprovechar el oxígeno del aire que respiramos de manera que, aunque aumentemos la velocidad, el consumo de oxígeno ya no aumenta, es decir, que ya no podemos utilizar más oxígeno del aire que estamos respirando. Este valor viene determinado genéticamente aunque se puede desarrollar con entrenamiento en un 20% aproximadamente.
En nuestro caso, tenemos un valor medio de 30 segundos de 58’6 con picos de 61, que es un buen valor para un corredor de fondo. Con 5 de lactato, lo que también nos indica que estamos dentro de unos datos adecuados y propios de un maratoniano.
A partir de aquí podemos obtener las gráficas que nos van a dictar dónde están nuestros umbrales aeróbico y anaeróbico.
El umbral aeróbico nos marca el punto de inflexión en el que se pierde eficiencia en la utilización de las grasas como fuente de energía, una información clave ya que nos va a permitir saber a qué ritmos y pulsaciones podemos hacer cada tipo de entrenamiento: tiradas largas, ritmos medios y entrenamientos fraccionados principalmente ya que, por ejemplo, nos permite saber cuándo estamos corriendo a ritmos altos o semialtos respecto a nuestro umbral, con el consiguiente riesgo de vaciarnos y de que nos dé una pájara.
Nuestro primer umbral se sitúa en 5:14 y el segundo en 4:18, con 140 y 164 pulsaciones respectivamente, al 64% y 84% de nuestros máximos. Esto arroja unos valores relativamente bajos, con lo que podemos deducir que en nuestro caso tenemos un buen margen de mejora.
Los ritmos ideales que se deducen para realizar las tiradas largas se moverían en una horquilla de 5:40/km – 5:15/km.
Además, los entrenamientos de diario, salidas de aproximadamente una hora, las podemos realizar en una horquilla ideal de 4:40/km – 5:00/km aproximadamente , mientras que para hacer fartleks nos podemos ir a ritmos de 4:20/km e incluso series anaeróbicas de 1000 – 1500 las podríamos hacer idealmente a 4 el mil.
Además, la prueba nos ha servido para hacer una previsión de nuestras marcas según nuestro estado de forma, dándonos un ritmo para maratón de 4:43 y de 4:19 para la media.
Esto nos ha servido para constatar que nuestro entrenamiento en la preparación del maratón de Valencia está siendo bastante moderado y podríamos exigirnos más en los ritmos sin miedo a pasarnos ya que el objetivo que nos hemos planteado (4:55/km) es bastante cómodo para nuestro buen estado de forma, lo que en este caso nos da seguridad y nos confirma que vamos a afrontar los 42 km con bastante margen.
Y hasta aquí nuestra grata experiencia con el chequeo médico avanzado de Salud Savia. Sin duda es algo que recomendamos hacer de forma periódica para asegurar que nuestro cuerpo y corazón están preparados para desarrollar la práctica deportiva sin ningún riesgo y, además, sacar nuestro máximo rendimiento.
¿Qué oferta tiene Savia en sus chequeos médicos deportivos personalizados?
La plataforma más completa de servicios de consultas presenciales y online, Savia, nos da la opción con sus chequeos deportivos y estudios personalizados de elegir el que más se ajuste a nuestras necesidades, desde una espirometría hasta un estudio biomecánico de la pisada, pasando por electrocardiogramas, ergometrías, analíticas de sangre…
Registrarse en Savia es gratuito, con atención médica online y presencial las 24h y con consultas sin esperas. Sin necesidad de contratar ningún plan ya podemos hablar con ellos por chat o videollamada para consultar nuestras necesidades.
Es más, tras registrarnos tenemos la opción de hablar con un médico especialista durante 30 días, lo que nos parece genial como primer contacto y nos puede ser útil para consultar sobre alguna lesión, también tenemos videoconsulta psicológica y alguna que otra ventaja interesante sin hacer ningún desembolso:
- Atención médica online y presencial las 24h. Sin contratos, sin póliza y sin
ataduras. - Disponible la posibilidad de videoconsulta médica inmediata, chat con especialistas
médicos, evaluador de síntomas, receta electrónica y videoconsulta psicológica. - Trabajan con un excepcional cuadro de médicos generales y especialistas y con los
mejores centros. - Consultas sin esperas.
- Puedes revisar tu historial médico siempre que quieras.
Una vez registrados, podemos comprar y reservar 100% de forma online nuestro chequeo deportivo. Sin duda algo más que recomendable para desarrollar nuestra práctica deportiva con seguridad al conocer cualquier factor de riesgo que podamos tener, evitando cualquier desagradable sorpresa.
Podéis encontrar toda la info en el sitio web oficial, Salud Savia.